Ante los más de 300 amparos que se han interpuesto contra la reforma laboral, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que las resistencias son porque esta es una nueva etapa, en la que no habrá “sindicalismo charro”, ni sindicatos predilectos del gobierno.
De acuerdo con la Secretaría del Trabajo, parte de los amparos que han presentado algunos sindicatos se sustentan en su desacuerdo con la cancelación del contrato colectivo si el dirigente está involucrado en actos de corrupción, con la rendición de cuentas del patrimonio sindical y porque el registro de contratos colectivos debe ampararse en el voto libre, directo de los trabajadores.
Durante su conferencia matutina, el presidente López Obrador explicó que, si bien es un derecho que tienen los líderes sindicales, así como los ciudadanos, interponer recursos legales al considerar que están siendo vulnerados sus derechos, la reforma laboral se implementará.
El presidente comentó que es cierto que diversos dirigentes han promovido amparos contra la reforma laboral, sin embargo, destacó que no son todos, pues la mayoría está aceptando con que son otros tiempos, en los que deberá prevalecer la libertad y la democracia.
Con información y foto cortesía Expansión Política